Precalienta el horno a 375 grados F (190 grados C).

Corta la mitad de la cebolla en cuartos gruesos y separa los trozos. Coloca los trozos de cebolla en una bandeja para hornear. Abre la lata de tomates en dados. Rocía cuidadosamente un poco del líquido sobre la cebolla.

Asa las cebollas en el horno precalentado hasta que estén blandas, aproximadamente 25 minutos.

Coloca las cebollas y los tomates en una licuadora de alta potencia, como una Vitamix. Cubre bien y licúa a alta velocidad durante 40 segundos.

Derrite la mantequilla en una cacerola a fuego medio. Vierte cuidadosamente la mezcla de tomate y cocina, revolviendo ocasionalmente hasta que esté caliente, aproximadamente 3 minutos.

Agrega 3 cucharadas de crema.