En una cacerola, lleva el agua a ebullición. Agrega el arroz y revuelve. Reduce el fuego, tapa y cocina a fuego lento durante 20 minutos. Una vez cocido, coloca el arroz en un tazón grande y deja enfriar hasta que esté lo suficientemente frío para manipularlo.

Mientras tanto, bate los huevos junto con 1/4 de cucharadita de sal. Unta el fondo de una sartén con aceite vegetal y colócala a fuego medio. Una vez caliente, vierte 1/6 de la mezcla de huevo y extiéndela uniformemente por el fondo de la sartén. Cocina hasta que el huevo se haya solidificado, luego dale la vuelta con cuidado y cocina unos segundos más para que se firme el otro lado. Repite con el huevo restante para crear 6 láminas finas.

Mezcla el vinagre, el azúcar y 1 cucharadita de sal en un tazón pequeño. Calienta en el microondas durante unos segundos hasta que la mezcla esté caliente; revuelve hasta que el azúcar se haya disuelto. Incorpora el vinagre y las semillas de sésamo al arroz tibio.