Precalienta el horno a 350°F (175°C).

Coloca las zanahorias y el agua en una olla. Lleva a ebullición, luego tapa, reduce el fuego a bajo y cocina a fuego lento hasta que estén suaves, aproximadamente 10 a 15 minutos.

Rompe los huevos en un tazón y resérvalos. Coloca las cáscaras de huevo en una bandeja para hornear.

Hornea las cáscaras de huevo en el horno precalentado hasta que estén secas, aproximadamente 5 a 7 minutos.

Tritura las cáscaras de huevo secas utilizando un mortero y mano o una licuadora de café.

Combina el pollo picado, los hígados de pollo, los huevos reservados, las cáscaras de huevo molidas y el aceite de semillas de girasol en una sartén grande. Calienta a fuego medio, revolviendo ocasionalmente, hasta que el pollo esté dorado y desmenuzado y los hígados ya no estén rosados, aproximadamente 5 a 7 minutos.

Coloca las espinacas encima de la mezcla de carne, luego cubre con una tapa y cocina al vapor hasta que estén suaves, aproximadamente 5 minutos.