Reúne todos los ingredientes. Precalienta el horno a 425 grados F (220 grados C) con la rejilla en posición media.

Combina las cebollas, el aceite y las ramitas de tomillo en una olla pesada o una gran olla holandesa.

Hornea, cubierto, en el horno precalentado, revolviendo una vez a la mitad, hasta que las cebollas estén marchitas y ligeramente doradas, aproximadamente 40 minutos. Destapa y continúa cocinando, revolviendo ocasionalmente, hasta que las cebollas estén doradas y caramelizadas, unos 30 minutos más.

Retira del horno e incorpora el jerez. Cocina a fuego medio, revolviendo constantemente, raspando cualquier resto dorado del fondo y los lados de la olla, hasta que el líquido se haya evaporado en su mayoría, aproximadamente 3 minutos.

Incorpora el caldo, la salsa Worcestershire, la pimienta, la sal y la hoja de laurel; lleva a ebullición a fuego alto. Reduce el fuego a medio-bajo y deja hervir a fuego lento, sin tocar, permitiendo que los sabores se mezclen, aproximadamente 15 minutos. Retira del fuego e incorpora el vinagre de sidra. Desecha las ramitas de tomillo y la hoja de laurel.

Aumenta la temperatura del horno a grill. Reparte la sopa uniformemente en 6 cuencos aptos para grill o cazuelas, y coloca los cuencos en una bandeja grande con borde. Cubre cada cuenco con 2 rebanadas de pan y aproximadamente 1/3 de taza de Gruyère.