Precalienta el horno a 325 grados F (165 grados C). Mezcla las migajas de galletas y la mantequilla derretida hasta que estén uniformemente combinadas.

Presiona en el fondo de un molde desmontable de 9 pulgadas.

Bate el queso crema, la crema agria y el azúcar juntos en un tazón con una batidora eléctrica hasta que esté suave y cremoso.

Agrega los huevos uno a la vez, batiendo bien entre cada adición. Mezcla el jugo de limón, la ralladura de limón y la vainilla hasta que esté suave.

Extiende la mezcla sobre la masa en el molde desmontable.

Hornea hasta que los bordes estén inflados y la superficie firme excepto por un pequeño punto tembloroso en el centro, alrededor de 1 hora.

Enfría a temperatura ambiente durante aproximadamente 1 hora y refrigera hasta que esté completamente frío, por al menos 3 a 4 horas.

Precalienta el horno a 375 grados F (190 grados C). Bate las claras de huevo hasta que se formen picos suaves.

Agrega el azúcar y el cremor tártaro, batiendo hasta que esté brillante y se formen picos firmes.

Extiende el curd de limón sobre el pastel de queso frío. Coloca el merengue batido encima, cubriendo completamente.

Hornea hasta que el merengue esté dorado, alrededor de 10 minutos.