Disuelve la levadura en agua tibia en un tazón pequeño. Deja reposar hasta que esté cremosa, aproximadamente 10 minutos.

Combina la harina, la manteca vegetal y la sal en un tazón grande; agrega la mezcla de levadura y revuelve hasta que la masa se una. Amasa sobre una superficie ligeramente enharinada hasta que esté suave y elástica, aproximadamente 8 minutos.

Unta ligeramente con aceite un tazón grande. Coloca la masa en el tazón y gírala para cubrirla con aceite. Cubre con un paño húmedo y deja que suba en un lugar cálido hasta que duplique su volumen, aproximadamente 45 minutos.

Calienta el aceite en una sartén pequeña a fuego medio. Agrega la cebolla y sofríe hasta que esté tierna, aproximadamente 5 minutos.

Incorpora la pasta de tomate, el agua, la sal, el azúcar, el orégano, el ajo en polvo, la albahaca, la mejorana, el comino, el chile en polvo, las hojuelas de pimienta roja y la pimienta negra; cocina a fuego lento durante 15 a 20 minutos.

Precalienta el horno a 400 grados F (200 grados C).

Divide la masa por la mitad. Extiende cada mitad en un círculo de 12 pulgadas. Coloca la masa en dos moldes para pizza de 12 pulgadas; cubre con salsa y queso mozzarella.