Reúne todos los ingredientes.

Prepara la Masa: Pulsa los conos de gofre, los pistachos y el azúcar en un procesador de alimentos hasta que la mezcla esté finamente molida, aproximadamente 20 pulsaciones (de 1 segundo). Agrega la mantequilla y pulsa hasta que la mezcla se mantenga unida al apretarla, deteniéndote para raspar los lados según sea necesario.

Engrasa ligeramente un molde para pastel de 9 pulgadas con spray para cocinar y transfiere la mezcla de conos de gofre al molde preparado, presionando uniformemente en el fondo y hacia arriba por los lados del molde. Congela la masa, sin cubrir, hasta que esté firme, unos 15 minutos.

Mientras tanto, prepara el Relleno: Pica finamente los pistachos y transfiérelos a un tazón mediano. Agrega la ricota, el mascarpone, el azúcar en polvo, las chispas de chocolate, la ralladura de naranja, la vainilla y la sal. Revuelve hasta que se combinen.

Bate la crema para batir con una batidora eléctrica a velocidad media-alta hasta que se formen picos medios, de 2 a 3 minutos. Vierte la crema batida sobre la mezcla de ricota y dóblala suavemente hasta que se combine.

Vierte la mezcla de ricota en la masa preparada y extiéndela en una capa uniforme. Cúbrela con papel plástico y refrigérala hasta que cuaje, al menos 4 horas o hasta 8 horas.