Coloque un pechuga de pollo en una tabla de cortar. Cubra la pechuga de pollo con plástico transparente y golpéela con un mazo hasta que tenga un grosor de 3/4 de pulgada. Repita con las pechugas restantes.

Sazone el pollo con 1/2 cucharadita de sal y 1/2 cucharadita de pimienta.

Caliente el aceite de oliva en una sartén grande a fuego medio-alto. Agregue el pollo y cocínelo hasta que esté dorado y un termómetro de lectura instantánea insertado en el centro de una pechuga marque al menos 165°F, de 8 a 10 minutos, volteando a la mitad. Retire el pollo de la sartén; resérvelo.

Agregue los espárragos a la sartén. Cocínelos a fuego medio-alto, hasta que estén de un verde brillante y tiernos-crujientes, revolviendo ocasionalmente, de 2 a 3 minutos. Retire los espárragos de la sartén; resérvelos.

Exprima la mitad del limón (aproximadamente 1 1/2 cucharadas de jugo) y corte la otra mitad en cuñas.

Agregue el jugo de limón, la crema para batir, el queso parmesano, el ajo y el condimento italiano a la sartén.

Hierva a fuego medio-alto, raspando el fondo de la sartén con una cuchara de madera para liberar cualquier resto dorado, durante 2 minutos. Sazone con la sal y pimienta restantes.