Precalienta el horno a 350°F (175°C). Rompe las galletas graham en el bol de un procesador de alimentos y añade el azúcar. Pulsa hasta que estén molidas gruesamente. Añade la mantequilla derretida y pulsa unas 4 veces hasta que la mezcla se parezca a arena húmeda; transfiere a una fuente para pastel y presiona muy suavemente en el fondo y hacia arriba en los lados del molde.

Hornea en el horno precalentado hasta que desprenda aroma, de 4 a 6 minutos. Deja enfriar.

Mezcla la leche condensada azucarada y el jugo de lima hasta que quede suave. Incorpora las yemas de huevo hasta que estén bien combinadas. Agrega la crema agria y la ralladura y revuelve hasta que quede suave.

Vierte el relleno sobre la base de galletas graham; extiende suavemente en una capa uniforme. Coloca el molde de tarta sobre una bandeja para hornear con borde.

Hornea en el horno precalentado hasta que esté firme alrededor de los bordes y ligeramente tembloroso en el centro, de 14 a 16 minutos. Retira a una rejilla para enfriar a temperatura ambiente, unos 40 minutos. Enfría la tarta en el refrigerador durante al menos 8 horas.