Lleva a ebullición una olla grande con agua salada. Agrega la pasta penne y cocina durante 2 minutos menos de lo indicado en las instrucciones del paquete, aproximadamente 9 minutos. Reserva 1 taza de agua de la pasta, escurre, enjuaga y reserva.

Precalienta el horno a 375°F (190°C). Engrasa un molde para hornear de 9x13 pulgadas.

Derrite 3 cucharadas de mantequilla en una sartén grande. Incorpora la harina y cocina hasta que esté dorada, aproximadamente 3 minutos. Añade gradualmente la leche fría mientras bates. Agrega la cebolla picada, las hojas de laurel, la pimienta de cayena y cocina hasta que la salsa bechamel espese, aproximadamente de 10 a 15 minutos. Agrega 1/4 de cucharadita de sal.

Combina la pasta cocida, la salsa bechamel, el atún, los guisantes y el queso Colby-Jack en un tazón grande. Mezcla bien, diluyendo con el agua reservada de la pasta si es necesario. Sazona con pimienta y la sal restante. Transfiere la mezcla al molde engrasado.

Derrite las 2 cucharadas restantes de mantequilla. Mezcla los cubos de pan con la mantequilla derretida y el queso parmesano hasta que estén cubiertos. Extiende la mezcla de pan uniformemente sobre el gratinado y cubre bien con papel aluminio.