Reúne todos tus ingredientes.

Cocina la salchicha, la carne molida, la cebolla y el ajo en una olla holandesa a fuego medio hasta que estén bien dorados.

Agrega los tomates triturados, la salsa de tomate, la pasta de tomate y el agua. Condimenta con azúcar, 2 cucharadas de perejil, albahaca, 1 cucharadita de sal, condimento italiano, semillas de hinojo y pimienta. Cocina a fuego lento, tapado, durante aproximadamente 1 ½ horas, revolviendo ocasionalmente.

Lleva una olla grande de agua ligeramente salada a ebullición. Cocina las láminas de lasaña en agua hirviendo durante 8 a 10 minutos. Escurre las láminas y enjuaga con agua fría.

En un tazón para mezclar, combina el queso ricotta con el huevo, las 2 cucharadas restantes de perejil y 1/2 cucharadita de sal.

Precalienta el horno a 375 grados F (190 grados C).

Para armar, extiende 1 ½ tazas de salsa de carne en el fondo de un molde para hornear de 9x13 pulgadas. Coloca 6 láminas de lasaña longitudinalmente sobre la salsa de carne, superponiéndolas ligeramente. Extiende la mitad de la mezcla de queso ricotta. Cubre con 1/3 de las rodajas de queso mozzarella. Vierte 1 ½ tazas de salsa de carne sobre la mozzarella y espolvorea con 1/4 de taza de queso parmesano.

Repite las capas y cubre con el queso mozzarella y parmesano restantes. Cubre con papel aluminio: para evitar que se pegue, rocía el papel aluminio con spray para cocinar o asegúrate de que no toque el queso.

Hornea en el horno precalentado durante 25 minutos. Retira el papel aluminio y hornea durante 25 minutos adicionales.